miércoles, 22 de febrero de 2017

The Hawlbaicin 1

            Hawlbaycin, Garnatix. Año cero de la New Age.
           
            Atrás queda la primavera del 2072, lo que ya será el tiempo pasado, olvidado para siempre. La ciudad está lista para realizar el evento del siglo: la última carrera del Campeonato Universal de Velocidad, la que otorgará el triunfo final a tan solo uno de los dos pilotos que optan al título. Para el reto se ha escogido el novísimo circuito urbano de la metrópolis: Garnatix, antes Granada. Un sinuoso y costosísimo trazado  construido especialmente para la ocasión. Presenta para toda la humanidad, desde el estudio flotante que levita sobre el New Square Center, antigua Plaza Nueva, el más famoso locutor de todos los tiempos pasados y los venideros, la voz del Cosmos para todos ustedes, por gentileza de la MTGVSPQR, la única tele posible, la de: Rodericus Himeneo das Antas.
¡Muy buenas noches desde este privilegiado y elevado lugar en el que me hallo  ahora mismo, desde el que podemos divisar todo el complejo, The Hawlbacin Town Resort Entertainment, por el que discurrirá buena parte de la carrera! ¡La iluminación es perfecta, para una noche perfecta! ¡La participación es espectacular, miles de criaturas llegadas de todos los rincones del espacio se han dado cita para presenciar en directo el duelo del siglo! ¡La infraestructura hiperchachimegaguay, creada en exclusiva para este evento es fascinante, amigos! ¡Los pilotos esperan la señal de salida: el fogonazo verde, a bordo se sus relucientes monturas, los rapidísimos Diablinex, los misiles gravitatorios MGP3000XXXL! ¡Quince Vehículos quince, para quince pilotos quince, pero solo dos tienen opciones de alzar el trofeo al final, porque solo puede quedar uno! ¡Compañeros de escudería, amigos y rivales, Frenando a Alfonso y Quique Novenzo, se jugarán esta noche el todo por el todo en este nuevo, mágico, y peligroso circuito de: The Dauro´s River Nostá! A tal efecto, no obstante, las autoridades locales invirtieron lo obtenido de hipotecar la Metrópolis en unas obras magnas para desviar el cauce del río, que ahora corre enterrado por las ruinas del antiguo barrio del Albayzín. Así los veloces Diablinex podrán correr por donde antes pasaban las aguas del Darro, por el canal que se practicó a través del desprendimiento de La Sabika y La Alhambra, que años atrás, con otra obra, también magna, taponó por accidente su curso, haciendo presa en él y arruinando, nunca mejor dicho, este entorno otrora paisajístico, emblemático, monumental y tal y tal, y todo eso que se decía entonces. Preside desde el palco el edil de la metrópolis, el nobilísimo prohombre: Pepito Minaretes, rodeado por su guardia pretoriana y acompañado de su séquito, entre el que se destaca la presencia, esta noche radiante, de Doña Mae Telesfriend, que tendrá el honor de pulsar el botoncito que ponga en marcha la cuenta atrás para el comienzo, tanto de esta trepidante carrera, como el principio de todo, de una nueva era... ¡Y allá la vemos ponerse en pie al fin, en la acristalada cúpula del Casino de Zafra, caminando entre aplausos y vítores dirigidos desde todos los lugares! El clamor popular es apabullante, ensordecedor. Se dan las últimas consignas en la parrilla de salida, los dos pilotos de la escudería Racing Team Towers, patrocinada por el señor Minaretes, ocupan la pole mientras se dedican miradas desafiantes. Todo está dispuesto, será una sola vuelta a este circuito nocturno, gravitando sobre el lecho del río, los Diablinex habrán de vencer la pista alcanzando el Hotel Valley Iesus, al que habrán de rodear para regresar de nuevo al New Square Center, saliendo de la boca del canal por el que... ¡Atención, todos preparados, Doña mae Telesfriend ya se encuentra frente al botoncito! Lo acaricia. Sonríe. Mira a ambos lados, y...
  


No hay comentarios:

Publicar un comentario